El sábado, el alcalde de Donostia, Juan Carlos Izagirre, ante la espantada del Señor de Gipuzkoa a la entrega de premios Joxe Mari Korta, decía, "Antes o después Bildu tendrá que ir a actos como los premios Joxe Mari Korta".
Me gusta este alcalde, en su día, con el pollo del ayuntamiento de Elorrio calificó de intolerable un acto de esos, no se esconde, sabe dónde está y sabe manejar los tempos. Creo que este es el camino.
Ayer se supo que por cuarta vez, el monolito que hay en Tolosa en memoria de Juan Mari Jauregi, asesinado por la banda mafiosa, había sido atacado y tendrá que volver a ser restaurado. Rastrero y fascista. Ya ha sido asesinado por vuestra idea retrograda y fascista de libertad, no hace falta regodearse en ello. Claro, esto es difícil de hacérselo entender al que no le sobran las neuronas.
La diputación de Gipuzkoa, sacó un comunicado en la tarde de ayer, "en el que mostró su «rechazo a este hecho, al igual que a todo tipo de acción violenta, independientemente del origen de la misma»" Es parte del camino, si, pero ...
Sé que es su manual de estilo, es parte del manual que lamentaba los asesinatos, sé que no se puede cambiar de la noche a la mañana, sé que un camino que otros llevamos haciendo y recorriendo 30 años no es fácil de recorrer en meses, lo sé, pero el pueblo vasco, cada vez que ponen la coletilla, piensa en los viejos tiempos y no termina de creerse sus pequeños avances.
Sinceramente, es igual que cuando se atacó la casa de los padres de un miembro de la banda mafiosa en Algorta, hubieran condenado la acción de la siguiente manera, "condenamos este ataque al igual que condenamos la violencia de la banda mafiosa". Sonaría raro, ¿no?.
Hay que empezar a dar más pasos y caminar más rápido, si no, las distancias no disminuirán nunca.
Salu2
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